El Lobo perdió por la mínima ante Ferro en Caballito y, por las victorias de Guillermo Brown y Guaraní, cayó en zona de descenso y no depende de sí mismo para salvarse.
Lejos quedó la buena etapa de Gimnasia al mando de Sergio Arias. Lejos quedó el arranque de Omar Labruna. Lo mismo para las maravillas que hizo César Carranza con esta camiseta. Claro, porque el Blanquinegro conoció una vez más la derrota frente al Verde y entró en puesto de descenso.
Como si fuera poco, tampoco depende de sí mismo para lograr la permanencia, a causa de que en la tabla fue superado por Guaraní y Guillermo Brown. Además, Central Córdoba se alejó más y Chacarita confirmó su continuidad en la segunda división del fútbol argentino, por lo que cada vez el margen de error es más chico.
El Lobo intentó ganar en el estadio de Ferro, generó chances para anotar en el primer tiempo y hasta lo hizo correr en el complemento, ya que el enfrentamiento se tornó de ida y vuelta, pero eso no le alcanzó y, a falta de diez minutos, recibió el gol del Verdolaga de Rodrigo Mazur que estableció el 1-0 definitivo.
El elenco de Mendoza sumó su tercera caída en fila y arribó al quinto compromiso sin victorias. También, vale remarcar que llegó al promedio de 1.097 y fue superado por Guaraní y Brown, por lo que está en un comprometido lugar del que probablemente tampoco pueda salir aunque venza a Villa Dálmine en la jornada final.
En definitiva, es difícil encontrar cuál fue el momento que hizo que Gimnasia esté ahora en esta situación, dado que en la mayoría de los transcursos del certamen estuvo cómodo y distanciado respecto al descenso. Pese a ello, a falta de una sola fecha para el final de la temporada, está en las manos de sus oponentes directos por no bajar al Torneo Federal A.
Lautaro Di Giorgio
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