Ganó, gustó y goleó

El conjunto paranaense vapuleó por 6-2 a Chacarita en el Presbítero B. Grella. Los goles del conjuntos Rojinegro fueron obra de Garrido por dos, Comas, Jara, Matías Quiroga y Minetti.

Comenzó mejor Chacarita, en el Grella, ya que tuvo la pelota y quiso profundizar con el juego de Damián Manso y Jorge Achucarro a espaldas de Diego Martínez. En su primer ataque, el Negro fue profundo y provocó un tiro de esquina. Buena apertura de Jara luego de recuperar un balón perdido y ceder hacia la izquierda para Orfano, que tiró el centro por lo bajo para encontrarse con la defensa de Rocaniere.

A los 10 de la primera etapa Patrón sufrió un revés, ya que Lucas Mazzulli se retiró lesionado con dolor en su pierna izquierda. En su lugar ingresó Lucas Márquez. De este modo, Marcos Minetti se adelantó al mediocampo y Lucas Márquez se paró como segundo central en la defensa del local.

Producto de la presión, Marcos Minetti dejó un balón suelto que Diego Jara tomó y partió habilitado -Rocaniere fue quien no siguió la jugada-. El concordiense vio a Lautaro Comas en soledad y cedió hacia el producto de la cantera del Patrón que le ganó el mano a mano a Carniel y abrió la cuenta en un partido que estaba muy trabado.

Los minutos que siguieron fueron todos para el Negro, que acorraló a la visita y lo desbordó por todos los sectores. Así fue que llegó el gol de Matías Garrido, que de volea tras desperdiciar un tiro libre, anotó el 2-0 y parecía sentenciar el cotejo. Pero no fue así.

Rápidamente un error de Diego Martínez y la viveza de Nahuel Menéndez terminó dándole un penal a la visita -bien sancionado- que finalizó en gol del arquero Gonzalo Carniel. Así Chaca volvió a ponerse en partido, cuando parecía estar ido.

A los 40 minutos, una pelota profunda de Orfano terminó en los pies de Comas, quien desde la derecha cedió a Jara por el medio, pero finalmente el concordiense se excedió en su confianza y no capitalizó una nueva chance para marcar ante el arquero goleador, Gonzalo Carniel.

En el complemento la espalda de Martínez fue el hueco que encontró Chacarita para comenzar a llegar al arco defendido por Bértoli. Constantemente las jugadas iban hacia ese sector y buscaban vulnerar al equipo paranaense.

Pero el Santo no quería sufrir. Luego de una serie de rebotes en el área, la pelota derivó en Lautaro Geminiani que, desde la derecha, envió un centro pasado y a media altura que cabeceó Jara logrando vulnerar a Carniel -quien había respondido bien- estirando la ventaja y poniendo el 3-1.

No sucedía demasiado a los 10 minutos del complemento hasta que Jonathan Menéndez recibió un balón perdido por Lautaro Geminiani, corrió de izquierda a derecha hacia adentro del área y la clavó en el ángulo más alejado de Bértoli, en el arco que da a calle Grella. Así volvió al partido elTricolor, que no hizo demasiado para anotar los dos tantos que finalmente terminó convirtiendo.

El partido tuvo 15 minutos en los que no ocurrió nada. Desde los 10 hasta los 25 la pelota pasaba de un lado para el otro, sin que ninguno pueda prevalecer por sobre el otro. La baja en la intensidad terminó favoreciendo al equipo de Iván Delfino, ya que el Funebrero se apaciguó y no encontró huecos para conseguir la igualdad.

A esa altura del partido, Delfino buscó una modificación que le permita rearmarse en la ofensiva. Así fue que ingresó Matías Quiroga por Jara, que en ese momento ya acumulaba varios minutos sin participar del desarrollo del juego.

El cambio hizo efecto, ya que ni bien ingresó Quiroga cedió para Comas, este tocó para Marcos Quiroga, quien disparó al arco y encontró a Carniel, sin embargo la pelota suelta llegó a Garrido que con un remate bajo y esquinado a contrapierna del arquero metió el segundo en su cuenta personal y el 4-2.

Enseguida, Patronato volvió a marcar. Matías Quiroga recibió un centro y marcó el quinto tanto. La cesión llegó desde la izquierda por un centro -de zurda- de Esteban Orfano que encontró la cabeza del Flaco. Así puso el 5-2 y liquidó la historia.

Sobre los 40, ya con todo liquidado, Achucarro hizo esforzarse a Bértoli con un remate esquinado abajo y al palo izquierdo. El arquero respondió bien y desvió el peligro hacia su izquierda. En tiempo cumplido, nuevamente el paraguayo desperdició un mano a mano ante Bértoli y desvió su disparo ancho por el palo izquierdo.

En los tres minutos de agregado sólo quedó tiempo para una gran jugada de Marcos Minetti, que abrió para el disparo de Garrido, el rebote de Carniel quedó en el área y lo tomó el mismo Minetti, que -de cabeza- puso el sexto y cerró la historia.

Así el Rojinegro se llevó tres puntos con una actuación brillante en el segundo tiempo, más allá de un par de desacoples en defensa. Tucumán le iba a dar una chance, se la dio y el Santo la aprovechó.

Gabriel Obelar