(Foto: La Gaceta) |
El decano dio vuelta el partido ante Chacarita y le ganó por 3 a 1. Así, queda a 6 puntos de Patronato, le saca 4 de ventaja a Santamarina y sueña con el ascenso directo.
Durante los primeros minutos, los visitantes no podían pasar la mitad de cancha salvo que recurran a algún pelotazo. Cuando lograron acomodarse en el campo de juego, comenzaron a demostrar su potencial con algunos remates que se iban desviados pero que tenían un tono de alarma.
Así, de a poco, el conjunto del Jardín de la República empezó a hacerse dueño de la mitad de cancha y por ende del desarrollo del cotejo. Por momentos, los locales parecían los tucumanos ya que atacaban ante un Funebrero que tranquilo y con paciencia esperaba ante las embestidas.
Sin embargo, a los 33 minutos todo se iba a ver desmoronado en el resultado. Maximiliano Paredes encaró con el balón, como imitando a Aliendro, realizó una pared con Facundo Melivilo y en la devolución quedó ubicado frente al arco.
La desesperación de Sbuttoni ante la inminente resolución del lateral, hizo que el defensor central toque la pelota y lo meta en propia valla. Auto gol y derrota parcial era el escenario adverso con el que tendría que jugar el Decano de ahí en más.
El esférico volvió a tener el mismo dueño pero esta vez con el factor del resultado en contra.
Cuando culminaba la primera parte, Nicolás Romat tiró un centro al área en donde había mucha presencia del dueño de casa. Igual, ello poco le importó a Luis Rodríguez, quién se adelantó a todos y a pesar de su baja estatura cabeceó para anotar la igualdad.
En la etapa complementaria, el juego iba a seguir con la misma temática. Los dirigidos por Azconzábal tenían el balón y lo manejaban a gusto y piacere.
A los 54’, Nicolás Romat aprovecharía una pelota que quedó a la deriva cerca del área local y remataba para dar vuelta el marcador. César Taborda no tuvo la mejor respuesta posible y eso ayudó al 4 para que festeje un tanto propio por primera vez en el torneo.
Lo positivo de Atlético en la competencia es que han festejado trece jugadores distintos, por lo que es un equipo en el cualquiera puede gritar gol.
A partir de allí, el duelo iba a entrar en una especie de meseta debido a que el Decano no sufría ante un rival que no encontraba la forma de generar peligro.
Ni siquiera las variantes realizadas por Fernando Gamboa ayudaron para modificar al desarrollo del juego.
Finalmente, cuando quedaba poco para la culminación, se liquidaba la acción. Sebastián Matos cambió el penal por gol. La acción de la pena máxima llegaría por una mano de Aliendro.
Atlético Tucumán se pudo imponer y deberá pensar en el encuentro ante Guaraní del próximo fin de semana.
Por Iván Ferrato
@FerratoIván
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