Entre tantas malas, una buena tenía que venir. Se confirmó finalmente la contratación de Schurrer, que a pesar de que no dirigió este partido, estará a partir de la semana que viene al mando del equipo. Dos derrotas consecutivas lo tenían a maltraer al equipo del norte del país que buscaba levantar urgente el nivel para seguir sumando en busca del objetivo, que es el ascenso.
A pesar de que el partido fue extremadamente chato, se pudo ver a un lobo jujeño más compacto en la segunda parte. Levantó el nivel Céliz, Peralta y Poclaba y hasta tuvo las mejores chances para llevarse el partido. Promediando los 25 minutos del complemento, Céliz a través de un magnífico tiro libre pudo haber marcado pero el palo le dijo que no. El conjunto local fue al ataque y a pesar de no haber conseguido el triunfo dejó una buena imagen en la tacita de plata. En tanto el Albo, cumplió su cometido: hizo un partido trabado y jugó a defenderse bien y tratar de convertir en alguna contra. En los minutos finales entró en el conformismo y se lo vio cómodo con el empate. El lobo tendrá tres bajas importantes de cara al próximo partido: Ferreyra y Céliz (llegaron a la quinta amarilla) y Poclaba que fue expulsado por doble amonestación.
Parece que la tormenta finalmente pasó para Gimnasia en una semana que fue para el olvido. Empate en cero, refuerzos (Chetti y Cáceres) y técnico nuevo para afrontar la segunda parte del semestre. El próximo fin de semana el conjunto jujeño deberá visitar a Douglas Haig en lo que será una linda oportunidad para volver a sumar de a tres.
Patricio Loudet
@Patoloudet
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